Cuando hace calor, tu maquillaje merece tanta protección como tu piel. Desde labiales que se derriten en el coche hasta bases de maquillaje que se separan con el sol, no hay nada peor que abrir el bolso y encontrarte un desastre. Por suerte, con unos sencillos trucos y cambios puedes mantener tus productos de belleza seguros durante todo el verano.
1. Invierte en una bolsa de maquillaje resistente al calor
Las bolsas comunes retienen el calor, lo que significa que tu brillo labial o rímel pueden convertirse rápidamente en un desastre líquido. Por eso, las bolsas de maquillaje térmicas (como las nuestras en Karsan Co) están diseñadas para mantener los productos a una temperatura más baja, perfectas para viajes largos al trabajo, vacaciones o simplemente para hacer recados.
2. Mantén el mínimo en el bolso
Con el calor, menos es más. Lleva solo lo necesario para retoques: polvos compactos, bálsamo labial, spray fijador en miniatura y quizás un corrector de viaje. Guarda el resto en casa, en un lugar fresco y seco.
3. Opte por fórmulas sólidas
Las barras, polvos y bálsamos en crema resisten mucho mejor al sol que los líquidos. Cambia tu base líquida por una en barra o elige rubor en crema en lugar de tintes líquidos.
4. Evite dejar bolsas en el coche
Incluso con aislamiento, el calor extremo puede ser duro. Si sabes que estarás lejos del coche durante horas, guarda tu bolso dentro o guárdalo a la sombra.
5. Refréscate antes de salir
Consejo: guarda la bolsa en el refrigerador de 10 a 15 minutos antes de salir de casa. Así, tus productos se mantendrán frescos y protegidos del calor.